¿Alguna vez te han dicho que tu
niño es demasiado sensible? Que vive las emociones con mucha intensidad. Quizá
te han dicho que tiene una vida interior muy rica y que sorprende a los adultos con preguntas muy profundas y conductas altruistas? , o tal vez te pregunten ¿Porqué les molestan tanto los ruidos fuertes, los ambientes bulliciosos , agresivos y caóticos? ¿Y porqué busca en situaciones de ajetreo estar a solas?
A lo mejor tú también notaste que tu niño
se muestra emocionalmente agotado con determinadas personas, lugares o
situaciones.
Si tu respuesta es si a estas cuestiones,
es probable que tu hijo sea parte de una comunidad de élite de niños a los que
llamo esponjas. Son niños auténticamente empáticos y muy sensibles a la energía que les rodea.
Si observas a un niño esponja notarás que su estado de ánimo a menudo cambia para adaptarse a la energía de
las personas con las que interactúa. Debido a esto, el mundo puede ser en
ocasiones muy abrumador, por lo que intentan protegerse optando por evitar muchedumbres,
situaciones violentas, lugares cerrados
y bulliciosos, el ruido y otras cosas con mucha energía.
Los auténticos niños esponja
tienen la capacidad de hacer que las personas se sientan contenidas, seguras,
vistas y escuchadas en su presencia. Su capacidad para sentir y procesar
emociones profundas aporta una luz y alegría
que ayuda a quitar la oscuridad de los corazones agitados y apenados.
Esto sucede debido a que los niños esponja sienten
la energía de los demás y responden a ella. Cada emoción vibra con una energía
diferente. La vibración del enojo es distinta a la de la ternura, y la de la ilusión
es diferente a la vibración del miedo. Cuando sentimos una profunda emoción,
esta genera una vibración particular que los niños esponja perciben de inmediato
como si tuviesen un radar emocional. Ellos lo sienten y actúan de manera natural en consecuencia. Es por esto que muestran una
gran compasión, que los mueve a buscar aliviar el sufrimiento del otro. Esta habilidad tiene sus pro y sus contra.
Un aprendizaje muy poderoso que
los niños esponja necesitan alcanzar es
la importancia de establecer limites protectores y decir “NO” a las
personas, pedidos y programas que los agotan emocionalmente o quitan bienestar. Como un autentico niño esponja es probable que esto sea bastante
difícil para tu niño , porque no quieren lastimar ni dejar de ayudar a otras personas. Pero es una
habilidad esencial para aprender así que los padres y maestros tenemos que
ponernos manos a la obra y enseñarles a decir NO.
Cuando aprenden a cuidar su gran
sensibilidad y a manejar su extraordinaria capacidad empática, adquieren la capacidad de cambiar el mundo.
En mi libro NIÑOS ESPONJA tenes muchísimos recursos para ayudar a los niños a cuidar su gran sensibilidad.
Con todo mi amor
Mariana de Anquin
FACEBOOK:MARIANA DE ANQUIN OFICIAL
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