Si piensas tanto en los demás puedes olvidarte de pensar en ti. Basta ya de hacer cosas que no sientes hacerlas porque los demás esperan eso de ti. Basta ya de ocultar lo que sientes por lo que pensaràn los demás de ti. Basta ya de decir SI, cuando tu corazón quiere gritar NO. Basta de decir NO, cuando tu corazón quiere gritar SI. Basta ya de forzarte a sentir y mostrarte de un modo que te permite encajar con lo que ellos hacen, piensan y sienten. Si quieres complacer a todos, te olvidarás de complacerte a ti mismo. Basta de hacer fuerza, mucha fuerza para intentar agradar a todos. Cuando hacemos esto, nos sentimos exhaustos y poco amados. Si quieres agradar a todos, pagarás un costo emocional muy alto. No solo que no lo conseguirás sino que crearás una desolación en tu interior. Un profundo vacío interior porque olvidaste llenar tu corazón con amor para ti mismo. Recuerda ser amable contigo mismo, recuerda que h...