Es muy importante enseñarles a los niños de pequeños que los pensamientos son la causa primera de todo. Los pensamientos, provocan las emociones. “Si te sientes mal, es porque tienes pensamientos que te hacen sentir así”. Los niños tienen que saber que es imposible sentirse mal y tener buenos pensamientos y a la inversa, no pueden sentirse bien, si tienen malos pensamientos. Podemos explicarles que existe una reacción en cadena: un pensamiento sostenido en la mente durante un tiempo, provoca una emoción que se corresponde con ese pensamiento e impacta directamente en nuestro cuerpo y en la conducta, manifestándose en los resultados de lo que hacemos. Si pienso en mi mente insistentemente que “No puedo “, esto genera una emoción que le corresponde a ese pensamiento, puede ser ira y frustración en un comienzo, hasta sentir temor y tristeza ante mi incapacidad. Este pensamiento NO PUEDO, junto con la emociones que vienen del mundo del dolor, impactan en la conducta y ...